"Tan solo tres segundos fueron necesarios
para quedarme prendado de los gestos de tus manos. Tú estabas tan
brillante y yo era tan cobarde, que esconderme en cada parte era mi modo de
afrontar la situación. Me resultaba tan romántico esa forma de estar
mirándonos. Fue tan extraño que estaremos mucho tiempo imaginándonos. Cómo
he podido echarte de menos estos días, si aún estamos en proceso de saber de
nuestras vidas. Y ahora tenemos toda la vida por delante, el tiempo está de
nuestra parte, trasladémonos a nuestra dimensión. Así que no estés tan
hermética, tan misteriosa y enigmática. A mí me gusta ser más básico, más
visceral, más práctico."
No hay comentarios:
Publicar un comentario